sábado, 1 de mayo de 2010

Apartéi

¿ A dónde quedaba esto? Creo que en las pezuñas risueñas de mis lagunas. ¿ Cuál es tu final, hermano mio? Fuiste que a recorrer el contorno de la naturalza. La fecunda puta de tu miseria, mia y vuestra, señor cíclope. ¡ Usted, sublime desagradable! Tú, que quisiste darle muerte al viajero perdido y castigado por los dioses olvidados de hecatombes de mortales. ¿ Solo por el triunfo de una guerra te han castigado? Sigue tu camino de adversidades y la sabiduria envuelta en letras se desliazará por este suelo frio de madera y depositará en él toda la experiencia posible. Todas las presencias exteriores incorporadas en tu sucia piel y sobre tu tormentosa cabeza resaltarán la vulnerabilidad de la razón, enemiga de estas. Te transumatarán alquimicamente desde bestia a ser humano, otra bestia diferente. ¿ Sabes que escucho desagradables voces femeninas sobre este territorio? Quimera serás por los anchos sufrimientos del mundo. Vagando despierto por islas desconocidas. ¡No quiero escuchar más esas voces Dios mío! En fin, me he agotado lo suficiente para no seguir hablando de ti, errante existencia inhumana, pues sigue trotando de tierras en aguas. Hasta pronto. Qué placer se sufre cuando acabamos de terminar una comunicación que se sostiene sobre un final forzado y fingido. ¡ Deja a su orgasmo! ¡No quiero seguir escuchando esas voces femeninas! Te lo pido una vez más Dios mio: Silencia al mundo...La comunicación. La prostituta más dominante enemiga de la soledad. ¿Sabes qué? Me comienzo a sentir un poco mal. Ya no quiero ir más sobre las madrugadas micros de vuestra ciudad para escupir la varda. Se me ha calentado la pierna derecha. Quiero desvelar mi conciencia limitada por un espacio reducido fabricante de juicios esenciales. Violar a los perros de la noche que acompañan a Apolo. La gente es extraña. El sentimiento de un exiliado político hacia su casi olvidado pais. Así es mi melancolía por vos(ce). Quiero escuchar nuevamente tu dulce voz francesa. Quiero que me vuelvas a corregir todas las pronunciaciones de los nombres gordos de tu pais. Quiero volver a enseñarte el diccionario chileno.Ven, hacia mi. Vuelve pronto. O si no, subiré yo a verte, a leerte que otra oda de Neruda. Que un sexo descontrolado por toda la vigilancia de la noche. Que el retorno constante de una respuesta testaruda e inaccesible para mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario