viernes, 23 de julio de 2010

dos invitaciones.




Con las tijeras te de-forman la parte superior de
tu cuerpo. Un disgusto total para la re-presentación
social. Luego por debajo de la puerta te susurra la Ley:
-orden de arresto- . Eres un alcohólico. Disgusto 
consecutivo para asociarte con el exterior. Resultado:
Quedarse arrinconádo en el escritorio de la casa
reprimiendo toda voluntad y deseo de salir ¿a dónde?




al mundo.

3 comentarios:

  1. Hola,
    Hurgueteando por Internet encontré tu Blog…
    Los textos, las citaciones, las imágenes, la música. Todo un minucioso y profundo corcoveo que se revela ante la absurdidad y pasividad de lo establecido. Saludos…
    Helena Blau

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  2. Hola Helena,
    gracias por lo dicho;
    espero seguir siendo
    de agrado para ti
    siempre; y de des-
    agrado, de vez en
    cuando, o si se prefiere,
    nunca.
    Abrazos.

    Patricio.

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  3. …muy de vez en cuanto :)
    (que el cambio nos hace ver y valorar)

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